domingo, 21 de abril de 2024

Realidad histórica y personalidad

 Según Miguel de Unamuno (en La Agonía del Cristianismo):

Habría que distinguir, ante todo, entre la realidad y la personalidad del sujeto histórico. Realidad deriva de res (cosa) y personalidad de persona. El judío saduceo Carlos Marx creía que son las cosas las que hacen y llevan a los hombres, y de aquí su concepción materialista de la Historia, su materialismo histórico—que podríamos llamar realismo—; pero los que queremos creer que son los hombres, que son las personas, los que hacen y llevan a las cosas, alimentamos, con duda y en agonía, la fe en la concepción histórica de la Historia, en la concepción personalista o espiritualista.

Persona, en latín, era el actor de tragedia o de la comedia, el que hacía un papel en ésta. La personalidad es la obra que en la Historia se cumple. 

¿Cuál fue el Sócrates histórico, el de Jenofonte, el de Platón, el de Aristófanes? El Sócrates histórico, el inmortal, no fue el hombre de carne y hueso y sangre que vivió en tal época en Atenas, sino que fue el que vivió en cada uno de los que le oyeron, y de todos estos se formó el que dejó su alma a la Humanidad. Y él, Sócrates, vive en ésta. 

¡Triste doctrina! ¡Sin duda... la verdad en el fondo es triste! ... "¡Triste está mi alma hasta la muerte!" (Marc., XV., 34). ¡Dura cosa tener que consolarse con la Historia! Triste está el alma hasta la muerte, pero es la carne la que le entristece. "¡Desgraciado hombre de mí!, ¿quién me librará de este cuerpo de muerte?" (Rom., VII, 24), clamaba San Pablo.

Y este cuerpo de muerte es el hombre carnal, fisiólógico, la cosa humana, y el otro, el que vive en los demás, en la Historia, es el hombre histórico. Sólo que el que vive en la Historia quiere vivir también en la carne, quiere arraigar la inmortalidad del alma en la resurrección de la carne. Y fue la agonía de San Pablo. La Historia, por otra parte, es realidad, tanto o más que la Naturaleza. La persona, es cosa, porque cosa deriva de causa. Y hasta narrando historia se hace historia. Las doctrinas personales de Carlos Marx, el judío saduceo que creía que las coas hacen a los hombres. Ha producido cosas. Entre otras, la actual revolución rusa. Por lo cual anduvo mucho más cerca de la realidad histórica Lenin, cuando, al decirle de algo que reñía con la realidad, replica: "¡Tanto peor para la realidad!" Si bien tomó esto de Hegel.

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